Dani Gordo compareció con gesto muy serio tras dejarse un punto ante el colista y fue muy explícito: "A mí es la primera hostia que me dan como entrenador en mi casa. El tema es aprender. Está permitido errar pero no cometer dos veces el mismo error. A la afición le pido paciencia, está claro que tiene que haber un cambio y lo va a haber".
El entrenador del Abanca Ademar reconoció que "cuando pudimos marcharnos en el marcador nos volvió a pasar lo mismo, muchos errores defensivos y de lanzamiento" y no puso paños calientes al tropiezo: "A partir de ahora aquí tienen que pasar cosas. Vamos a tener una reunión, analizar cómo estamos, qué podemos mejorar, qué nos falta y siendo conscientes del equipo que somos tenemos que dar otra imagen. La afición quiere ver otra cosa y es normal".
¿Se refiere a fichajes, a salidas de jugadores? "Cuando hablo de cambios me refiero a hacer un diagnóstico de lo que está pasando y ver de qué manera se le puede poner tratamiento. La solución puede ser cualquiera, la que se te pase por la cabeza. Hablé antes del partido con los capitanes porque me preocupaba no ser capaz de transmitir lo importante que era hacer dos buenos partidos esta semana. Pero es una característica de este equipo, el hacerlo bien y no ser consciente de que hay que seguir. Que nuestra liga es cada partido, ni quedar segundos ni clasificarnos... Si nos salimos de ese guión estamos perdidos. Me voy a dejar la vida en trasladar ese mensaje, todo lo que pueda hacer como entrenador lo voy a hacer".
Gordo fue abucheado desde la grada al final del partido, críticas que espera revertir a base de trabajo. "Si yo hubiera estado en la grada, como ademarista que soy, soy consciente de lo que habría opinado y manifestado. Es doloroso, pero no hay justificación ninguna. Esto nos tiene que servir como lección de aprendizaje"